Después de ti
Una lágrima por cada sonrisa que me diste. Por cada temblor y por cada exceso. Por cada bocanada.
Mi llanto es un exorcismo, porque lo poseíste todo. Porque apenas encuentro trazas de mi mismo.
Me regalaste tu irreverencia vestida de pasos. Mis caminos no son los mismos después de que tu los recorriste.
Me dejaste herido cuando destrozaste mi prisión. Tu libertad quedó tatuada en mi cuello.
Sangré cuando me pusiste alas.
Una lágrima porque tu te vas y porque yo sigo mi camino hacia ninguna parte. Porque hicimos arte de la irrelevancia con el sentido que le dimos al paisaje.
Mi llanto es la vida que se me estaba fugando y que tu me devolviste a golpes.